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#VanLife: vivir en una furgoneta

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Viajar es la única cosa que compras que te hace más rico.

Aventura es el nombre de la camper de Sole y Jonás. Les gusta levantarse con el primer rayo de luz y acostarse temprano absorbiendo los ritmos del sol. Cuando van al mar, lo primero que hacen es ir a la playa y mojarse los pies. Cuando visitan una ciudad, prefieren pernoctar a las afueras y visitarla en bici.

El mundo del caravaning es muy saludable, aunque no todo vale. Para conducir una autocaravana de más de 3.500 kg es necesario tener el carné C1, de vehículos pesados, y la velocidad hay que reducirla en autovías a 90 Km/h y en carreteras a 80 Km/h, pues los límites de velocidad se reducen según el peso del vehículo.

¿Caravana o autocaravana?

La caravana no tiene motor, no admite pasajeros y es arrastrada por otro vehículo como un coche. En el coche pueden viajar tantas personas como plazas tenga disponibles.

Sin embargo, una autocaravana es un vehículo que permite vivir y viajar en su interior.

Admite tantas personas como asientos homologados tenga, según la ficha técnica de tu vehículo.

¡Ojo dónde aparcas! Existen espacios habilitados como campings y áreas de pernocta.

También tienes que distinguir entre pernoctar y acampar, ya que puedes dormir dentro de tu autocaravana o furgoneta camper en cualquier sitio donde no esté prohibido aparcar, y siempre y cuando no “acampes”, esto es, no sacar ningún elemento al exterior (sillas, toldos, incluso ventanas abatibles…).

¿Y el seguro para cuándo?

Contrátalo antes de arrancar el motor. Aparte de las coberturas clásicas (RC, robo, incendio, lunas, asistencia en viaje…), nosotros te recomendamos proteger las ventanas y claraboyas.

Tu casa está al aire libre, así que cubre los daños meteorológicos y atmosféricos. Y asegura tus efectos personales dentro y fuera del vehículo, antes que desaparezcan tus bicicletas.

Disfruta de tu “Movimiento Van Life”